Danza teatro: EL AMOR DE DON PERLIMPLIN CON BELISA EN SU JARDÍN
A cargo de la compañía Mónica Tello
Desde el principio de los tiempos estaba el amor, esperando para ser verbo. Un amor universal, eterno y atemporal, hoy os vamos a contar una excepcional, en la que el amor se permitió transfigurarse, en una forma caprichosa y perversa aparentemente, pero que demostrarse ser lo que el amor es, inmensidad.